¿No hay que “recuperar la memoria histórica”
“zapateril” y la “democrática” de Su Sanchidad? Pues vayamos a ello.
Anarquistas
contra comunistas.
Como
ya saben, el periódico “Solidaridad obrera” era el portavoz del anarquismo español de aquellos años. En
el número correspondiente al 26 de marzo de 1936, una vez celebradas las
votaciones, que no elecciones, aparece una editorial que refleja el verdadero
anarquismo, redactando además cosas inconcretas, a la vez que se ve la ceguera
y la fe en cosas absurdas. Esto también pasa en estos momentos en España. Dicha
editorial decía:
“Estos días se ha
venido repitiendo la frase de Lenin en distintos periódicos marxistas y de
izquierda. Lenin dijo en un discurso que la segunda nación de Europa que
utilizaría la dictadura del proletariado sería España.
Lenin hablaba
puramente desde un punto de vista subjetivo, global, de los movimientos obreros
en el mundo. Hombre inteligente, estaba al aviso de todas aquellas corrientes
societarias que se desarrollan en el mundo. Pero Lenín no conocía ni el estado
temperamental de España, ni siquiera el complejo de nacionalidad, que influye
sobre el individuo de una manera fatal y directa.
Aquí no se admiten
dictaduras, ni rojas, ni azules, ni negras. El imperio de la fuerza bruta podrá
en ciertos momentos hacer callar la protesta individual o colectiva; pero de
repente surgirá la rebeldía, que cada español lleva en su pecho, como una fuerza
impulsiva que le marca la misma naturaleza y sufrimiento, puesto a prueba, a
través de años, de siglos de tiranía y despotismo inmensamente seculares.
Los trabajadores
españoles tienen por delante el ejemplo y la lección de los hechos históricos
que les han demostrado que las dictaduras, llámense como se llamen, y tengan el
color que tengan, han marcado en el camino de la emancipación proletaria un sentido
de regresión.
Los trabajadores
españoles no votarán nunca por la dictadura llamada del proletariado.
Pese a Lenin y a
todos sus panegiristas, España va directamente hacia una revolución de tipo
libertario; es decir, de carácter antiautoritario y estatal”.
Hay
un párrafo en el que, refiriéndose a la revolución anarquista, se lee lo
siguiente:
“Demostraría que
la libertad es posible, que la autoridad no es necesaria, que la dictadura es
siempre perniciosa y que, al margen del control estatal, la ordenación solidaria de las relaciones
humanas alcanzará toda su fuerza y esplendor.
No es
necesario en España pasar por la experiencia rusa. Los hechos nos han
demostrado que el proletariado de aquella nación está controlado, dirigido y,
por qué no decirlo, tiranizado por un Gobierno dictatorial que responde a la
concepción férrea, esclavizadora del Estado, llámese burgués o proletario” ( I )
No
hacemos ningún comentario sobre estos párrafos porque se comentan por sí solos.
Nota.-
Lo destacado en rojo es nuestro.
( I ).- “Los documentos de la primavera trágica”,
autor Ricardo de la Cierva y de Hoces, editado por Secretaría General Técnica,
Sección de Estudios sobre la guerra de España, Madrid 1967, páginas 75 a 77.
Continuará.
¡Menudo “vínculo luminoso”!
No hay comentarios:
Publicar un comentario