viernes, 22 de noviembre de 2019

Orlando Zapata y la “raleaza”



Como ya saben, estos dos sujetos de  la “raleaza”, es decir, Felipe y la Letizia, estuvieron hace unos días en Cuba que, según algunos, fue un viaje “histórico”. Sin comentarios.

Decía un infumable pedante marxista, que Fidel Castro había sido una “personalidad histórica”. Pues bien, el régimen tiránico y criminal de esta “personalidad histórica”, asesinó, entre varios mieles, al disidente cubano Orlando Zapata Tamayo, el  23 de febrero de 2010, después de tres meses de huelga de hambre. El óbito se produjo en el Hospital “Hermanos Ameijeiras” de La Habana. El asesinado contaba 42 años de edad y había sido condenado, junto a otros 70 compatriotas, a 36 años de cárcel

Su madre manifestaba: “Ya asesinaron a Orlando Zapata Tamayo, ya acabaron con él, a las tres de la tarde de hoy. Esto ha sido un asesinato premeditado y sólo me queda dar las gracias a todos los países que lucharon para que no muriera” .

Los “crímenes” cometidos por Orlando, al igual que los cometidos por todos los disidentes cubanos, fueron los de protestar ante la dictadura para que se implantasen los derechos humanos.

Una vez en prisión, continuó luchando por las mismas ideas que le habían encarcelado, denunciando las condiciones de vida de los presos, tales como abusos y malos tratos.

El cualquier régimen democrático tales denuncias y protestas, incluida la huelga de hambre, serían  reflejo de un derecho tan fundamental como es el de discrepar y el de expresar con libertad opiniones, ideas y expresiones contrarias al régimen. Pero esto allí, lo mismo que en cualquier país comunista, no existe. La tortura, las privaciones y el terrorismo de Estado, al más puro estilo marxista-leninista, es lo que impera en aquella bella isla ¡Pobres cubanos!

Orlando no había matado ni hecho daño a nadie. Sin embargo aquí, un criminal y asesino como De Juana Chaos, después de una ficticia huelga de hambre, fue liberado, poniendo de rodillas a aquella “democracia” “zapateril” que teníamos en aquellos momentos en España.

Esta “personalidad histórica” (como él hay varias en el mundo) defendía unas ideas anacrónicas, obsoletas, trasnochadas y fuera de todo lugar, tiempo, situación y hábito, a base del crimen y el asesinato. Pero es igual: aún sigue teniendo predicamento y el sistema sigue siendo para muchos el “modelo referencial”.

¿Habrán comentado algo sobre esto, estos dos sujetos de la “raleaza?

Y para terminar, pinchen en el siguiente enlace. Una joya.





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