Inmediatamente después de la masacre del 11M, vimos como un sector de políticos españoles exigía al gobierno del PP la rápida aclaración de los hechos: “¿Quién ha sido?”. Reclamaban transparencia y rapidez.
Primero.- Quién depositó las mochilas en los trenes.
Segundo.- Quién ayudó a preparar dichas mochilas.
Tercero.- Quién suministró los explosivos.
Cuarto.- Quién eligió la fecha del 11M
Quinto.- Quién dio la orden de cometer el atentado.
Sexto.- Qué dicen las grabaciones hechas a algunos de los implicados, grabaciones existentes según se indica en los autos judiciales.
Séptimo.- Si el transporte de los explosivos se decidió en una reunión en la que 4 de los 7 asistentes eran confidentes de la policía.
Octavo.- Las conversaciones de esos confidentes en las llamadas telefónicas que tuvieron lugar durante los días 1, 2, 4, 9 y 10 de marzo de 2.004
Noveno.- Cómo nadie impidió el tráfico de los cientos de kilos de dinamita robados.
Décimo.- Por qué los teléfonos móviles que se usaron en la masacre, han sido adquiridos por personas de nacionalidad búlgara.
Undécimo.- Si las caravanas de la muerte (una de ETA y otra de presuntos terroristas islámicos) se dirigían a Madrid el 28 de febrero.
Duodécimo.- Cómo es posible que cacos de poca monta hayan cometido tal atrocidad ante las mismísimas narices de las fuerzas de seguridad.
Decimotercero.- Si alguien avisó del atentado.
Todos aquellos que llamaron asesinos a muchos millones de españoles, hoy miran para otro lado y tratan de cerrar en falso el asunto. ¿Cómo se puede cerrar la investigación sin contestar a las preguntas anteriores?. La factoría Rub-al-Qaba se encargará, y se encargó, de ofrecernos otra de sus producciones en “miracle mirror”. Rub-al-Qaba, ¡queremos saber la verdad!.
Se acordarán que al poco tiempo del terrible atentado, ETA cometió varios atentados en Cantabria y Asturias (Ribadesella, Gijón y Llanes). José Antonio Alonso, a la sazón Ministro del Interior, manifiestó que “el Ministerio del Interior condena este tipo de hechos, que lo único que pretenden es afectar a la tranquilidad de los ciudadanos en estas fechas veraniegas”. ¡Oh Kalícrates sapientísimo . . .!. Señor Alonso: su ministerio no está para condenar los atentados, sino para perseguir a sus autores e impedir que se sigan cometiendo más actos terroristas. Sus declaraciones parecen más bien propias del presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Hostelería.
Antonio Trevín, delegado del Gobierno en Asturias, también hizo declaraciones en la línea de su ministro: son petardos poco más que voladores. No se da cuenta de la trampa de ETA, que quiere dar a entender que sus actos no son tan sanguinarios como los de los islamistas.
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