Los politicastros y la Historia

 

Según el Diccionario de los “inmortales” de la RAE, politicastro es “político inhábil, rastrero, mal intencionado, que actúa con fines y medios turbios”. Tal parece que esto es lo que tenemos en estos momentos en esta desguazada y destartalada España.

Estos politicastros, ante las ilógicas e irracionales pretensiones y exigencias del independentismo catalán y vasco, quieren imponer en España un Estado Federal, asunto este que no tiene nada que ver con la marcha histórica de nuestra Patria, como quedó sobradamente demostrado en lo sucedido hace quinientos años, en donde la situación política y social estaba fragmentada y pulverizada por mor de la Reconquista que, como ya se sabe, duró casi 800 años, exactamente 781 (711-1492).

 

La guerra contra el Islam supuso la creación de minúsculas entidades geográficas, que estaban regidas por líderes y cabecillas que se autocoronaban como reyes, surgiendo barreras por doquier, aunque tenían un denominador común: su fe. Así quedó demostrado cuando el Califato de Córdoba se descompuso, resultando los Reinos Taifas, contra los que tuvo que luchar el cristianismo hasta dominarlos a todos después del último enfrentamiento y guerra de Granada. En una palabra: el sentimiento de unidad nacional estaba presente en la conciencia de los españoles de aquellos tiempos. Y después, con la llegada de los Reyes Católicos, tuvo lugar la unión de los dos grandes reinos de Castilla y Aragón, ampliados con la conquista de Granada, último reducto musulmán, y posteriormente la adhesión del reino de Navarra.

 

A partir de aquel entonces, quinientos años nos contemplan, España pasó de ser un lugar de Estados o Reinos, convirtiéndose en un auténtico, verdadero y cohesionado Estado.

 

Visto lo anterior, pululan ahora por ahí ciertos politicastros de tres al cuarto, que afirman que en pequeños territorios, como Cataluña o Vascongadas, hay “hechos diferenciales”, tales como cultura y lengua propias, o el factor RH negativo, oiga. La verdad es que ni Cataluña, perdón, Catalonia, fue nunca una nación, ni todos los vascos tiene ese factor sanguíneo.

 

Ahora, ya en el siglo X X I, se ha inventado eso que llaman Autonomías, que prácticamente son como los antiguos reinos de los tiempos de la Reconquista, amén de caer en el sistema federal de los Reyes Católicos que, afortunadamente, se superó.

 

Pero dichos politicastros actuales, ignoran, u omiten a sabiendas, que el sistema federal se utilizó y aplicó para unir y articular lo que estaba separado. Ahí están, por poner un par de ejemplos, los casos de Alemania y Estados Unidos, en donde los territorios se unieron para hacerse más fuertes, y lo hicieron, obviamente, varios siglos más tarde en los que España ya tenía su unidad política.

 

Pero claro, como “España es diferente”, somos incapaces de aprender de nuestra historia, ya que sólo sabemos “recuperarla” ¿Se acuerdan de la Primera República, en la que había 17 estados (tantos como las actuales autonomías) que terminaron guerreando unos contra otros? De la Segunda República no comentamos nada porque es sobradamente conocido lo que sucedió con el “Estat Català” y el “País Vasco Independiente”

 

En fin, habría que decirles a estos politicastros que estudiasen, aunque fuese un poco, la Historia de nuestra Patria, pero, claro, oiga, hay que mirar para el panel ideológico a ver qué dice.

 

Y terminamos con dos frases: una del escritor bilbaíno Miguel de Unamuno y Jugo, y otra de la chilena-estadounidense, también escritora, Isabel Allende:

 

“Procuremos más ser padres de nuestro porvenir, que hijos de nuestro pasado”, decía Unamuno

 

“Lo que más temo es el poder de la impunidad. Le temo al abuso de poder, y al poder de abusar”, decía Allende.