lunes, 7 de enero de 2019

De manitas a chapuzas



Siempre sentimos gran admiración hacia los “manitas”, esas personas poco menos que superdotadas para todo tipo de habilidades manuales y que son unos auténticos magos. Los hay que lo mismo hacen de fontaneros,  electricistas, albañiles, pintores, mecánicos, etc.

Ante estos artistas, que en el fondo son verdaderos técnicos en mantenimiento y conservación del hogar, nos descubrimos con cierta envidia y reconocemos nuestra desastrosa operatividad cuando nos ponemos, por ejemplo, a arreglar o reparar un grifo, por ejemplo.

Pero ahora, en estos tiempos, estos “manitas” van desapareciendo, y cuando hay algún problema se tira de teléfono y te aparece por casa un individuo cargado de maletas y herramientas que te cobra 30 € por salida, amén de lo que pueda costar la reparación. Estos individuos suelen ser unos chapuzas de tres al cuarto a los que no se les puede reclamar nada.

Salvo honrosas excepciones, estos chapuzas son una auténtica pléyade que campan por sus respetos y no hay forma de denunciarlos, ya que no te dan factura.

En fin, así está el país de la chapucería, de la ineptitud y de la irresponsabilidad, entre otras muchas cosas peores.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog