lunes, 20 de febrero de 2012

Recordando la Historia. Otro asesinato más


No se trata de ningún actor de moda.

Está mirando a un fotógrafo ruso unos segundos antes de que le fusilen. Es el 18 de agosto de 1936.

Es un sacerdote de 25 años que se llama Martín Martínez Pascual.

Su crimen es ser cura (para los de las memorias históricas y demás defensores de las libertades)

Ha ido a su pueblo Valdealgorfa, provincia de Teruel  a pasar unas vacaciones de verano con sus padres y le ha pillado allí la movida.

El 26 de julio, avisado de que lo buscaban para matarlo, se escondió en casa de algunas familias amigas. Más tarde huyó a una finca a tres kilómetros del pueblo y se ocultó en una cueva.

El 18 de agosto por la mañana detuvieron a todos los sacerdotes que había en Valdealgorfa. Al no encontrar a Martín, encarcelaron a su padre. Inmediatamente, la familia envió recado a D. Martín para que escapara. Pero éste, en cuanto se enteró, echó a correr a toda prisa hacia el pueblo para presentarse al Comité. Un miliciano muy amigo le salió al paso, rogándole que huyera; pero Martín le dijo que no podía consentir que su padre padeciera por él y que quería correr la misma suerte que los demás sacerdotes. Ya ante el Comité, este miliciano todavía quiso salvar a Martín, diciendo que se trataba de un joven estudiante. Pero él confesó que era sacerdote y dio a su amigo un abrazo para que lo transmitiera a su familia. “Yo quiero morir mártir con mis compañeros”, decía.

Sólo estuvo unos minutos apresado. Inmediatamente lo llevaron a pie hasta la plaza del pueblo, donde lo subieron con otros cinco sacerdotes y nueve seglares a un camión camino del cementerio. Antes de llegar, en el camino, los mataron. Los colocaron de espaldas; pero Martín quiso morir de frente, como lo vemos en la foto. Antes de disparar, les preguntaron si deseaban alguna cosa. Martín respondió: “Yo noquiero sino daros mi bendición para que Dios no os tome en cuenta la locura que vais a cometer”. Y después de bendecirles añadió: “Y ahora que me dejéis gritar con todas mis fuerzas: ¡Viva Cristo Rey!”.

domingo, 19 de febrero de 2012

La muletilla


La gente de izquierdas, cuando le interesa, recurre a la Constitución para defender sus posturas, sus normas, sus reglamentos, sus leyes y sus intereses, ya sean económicos o políticos. Pero cuando algo se sale de todo esto que hemos citado, recurren a la muletilla de “inconstitucional”. Tal es el caso de la sentencia de ”nuestro juez estrella” Baltasar Garzón que, como ya se sabe, ha sido condenado por  “delito  de  prevaricación  del  art.  446.3  del  Código  Penal  y  delito cometido por funcionario público de uso de artificios de escucha y grabación, con violación de las garantías constitucionales del art. 536, pfo 1º del Código Penal”.

Los citados artículos del Código Penal, dicen:
 

Artículo 446.

El Juez o Magistrado que, a sabiendas, dictare sentencia o resolución injusta será castigado:

1. Con la pena de prisión de uno a cuatro años si se trata de sentencia injusta contra el reo en causa criminal por delito y la sentencia no hubiera llegado a ejecutarse, y con la misma pena en su mitad superior y multa de doce a veinticuatro meses si se ha ejecutado. En ambos casos se impondrá, además, la pena de inhabilitación absoluta por tiempo de diez a veinte años.

2. Con la pena de multa de seis a doce meses e inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de seis a diez años, si se tratara de una sentencia injusta contra el reo dictada en proceso por falta.

3. Con la pena de multa de doce a veinticuatro meses e inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de diez a veinte años, cuando dictara cualquier otra sentencia o resolución injustas
Artículo 536

CAPÍTULO V. DE LOS DELITOS COMETIDOS POR LOS FUNCIONARIOS PÚBLICOS CONTRA LAS GARANTÍAS CONSTITUCIONALES

“La autoridad, funcionario público o agente de éstos que, mediando causa por delito, interceptare las telecomunicaciones o utilizare artificios técnicos de escuchas, transmisión, grabación o reproducción del sonido, de la imagen o de cualquier otra señal de comunicación, con violación de las garantías constitucionales o legales, incurrirá en la pena de inhabilitación especial para empleo o cargo público de dos a seis años.
Si divulgare o revelare la información obtenida, se impondrán las penas de inhabilitación especial, en su mitad superior y, además, la de multa de seis a dieciocho meses”.


Obsérvese que este artículo habla de garantías constitucionales, que también se mencionan en la sentencia.

Otro día comentaremos algo sobre el artículo 25, párrafo 2, de la Constitución. De lo que allí se expone nadie comenta nada ni se “indigna”.

Luis David Bernaldo de Quirós Arias

La Ópera ( X I I I )


Argumentos de algunas óperas


MADAME BUTTERFLY
(Autor: Giacomo Puccini - Actos: III)



Fuente.- Ópera basada en la novela de John Luther Long y en la pieza teatral de David Velasco, basada a su vez en la novela.

Personajes.- Cio-Cio-San, llamada madame Butterfly, joven japonesa (soprano); Suzuki, su criada y mujer de confianza (mezzosoprano); F.B. Pinkerton, oficial de la marina estadounidense (tenor); Su esposa Kate (soprano); Sharpless, cónsul de EE.UU. (barítono); Goro, casamentero (tenor); el príncipe Yamadori (tenor); el tío Bonze, sacerdote (bajo); la madre de Butterfly, un comisario imperial, un funcionario del registro civil.

Lugar y época.- Una casa en una colina de las afueras de Nagasaki a comienzos del siglo XX.

Argumento.- Una animada obertura, totalmente independiente de la ópera en cuanto a temas, describe la actividad del día que comienza el drama.

En un pintoresco paisaje japonés, el casamentero Goro enseña al oficial de marina Pinkerton la casita que éste piensa adquirir "por 99 años", con posibilidad de rescindir el contrato en cualquier momento. También ha obtenido a una joven, una geisha de quince años, de Nagasaki, para celebrar con ella, que lo ama sinceramente, un simulacro de matrimonio antes de volver a su patria. El cónsul de su país le desaconseja la aventura, que sólo podrá causar dolor y sufrimiento a la inocente y encantadora "Butterfly". Sin embargo, Pinkerton no sigue su consejo. Levanta la copa para hacer un brindis, que comienza con las notas del himno nacional estadounidense. El cortejo que acompaña a la novia sube la colina. (Puccini utiliza la escala fundamental Do-Re-Mi-Fa sostenido-Sol sostenido-La sostenido y los "acordes aumentados" que se derivan de ella que transmiten una sensación de exotismo y que particularmente en el dúo de amor que sigue producen un bellísimo efecto).

La boda se celebra según la costumbre del país. Pinkerton sigue la ceremonia con humor. Cio-Cio-San está presente con toda su alma. Ama al joven oficial de marina con todas las fuerzas de su corazón incauto. Ler habla de su familia, de su padre, un alto dignatario de Mikado, que se hizo el harakiri cuando cayó en desgracia. A lo lejos se oye la voz del tío Bonze, a quien Cio-Cio-San maldice porque se convirtió al cristianismo. Pinkerton no lo sabía. Lentamente reconoce con cuánto amor depende de él aquella criatura encantadora. Cae la noche: un amplio cielo lleno de estrellas pende sobre las luces de la ciudad del valle, sobre la bahía llena de barcos, sobre la pequeña casa en cuyo jardín la joven japonesa y el oficial extranjero cantan su amor en un gran dúo muy melodioso.

Han transcurrido tres años. Pinkerton está ausente desde hace mucho: ha prometido volver. Butterfly se imagina la alegría del oficial no sólo cuando la encuentre, sino también cuando conozca a su pequeño hijo, de cuya existencia no tiene el hombre la menor sospecha. Sólo la fiel Suzuki llora y reza sin descanso. Sospecha la cruel traición. Ci-Cio-San, en cambio, sólo piensa en el día feliz en el que la nave de Pinkerton vuelva a entrar en la bahía de Nagasaki. ¿Bajará corriendo la colina para arrojarse en sus brazos?. ¿O se ocultará para sorprenderlo, pero también para no morir de alegría ante el inesperado reencuentro?. Con fe inconmovible se aferra a esta imagen, a la que Puccini ha dado una forma musical conmovedora en un aria grandiosa: "Un bel di vedremo..."

Llega el cónsul Sharpless de visita. Madame Butterfly lo recibe con educación occidental. Se queja de Goro, que la abruma con propuestas matrimoniales ¡como si no supiera que está casada felizmente con Pinkerton!. Sharpless suspira: está allí para cumplir una triste misión. Ha recibido una carta de Pinkerton. Antes de que pueda decir nada sobre su contenido, Cio-Cio-San le arrebata el sobre y lo cubre de ardientes besos. Y de todo lo que el cónsul comienza a decir cuidadosamente, sólo entiende una cosa: que Pinkerton va camino de Nagasaki. Sharpless no puede seguir leyendo. Butterfly lo agobia a preguntas, está llena de impaciente alegría. ¡Si supiera que el oficial se ha casado con una norteamericana que lo acompaña en el viaje...!. Sharpless sólo acierta a preguntarle qué haría si Pinkerton no regresara con ella. La japonesa responde tristemente que sólo le quedarían dos caminos: ser geishsa como antes o morir. El cónsul le aconseja casarse con el rico príncipe Yamadori, que ha pedido su mano. Entonces se da cuenta de que ha herido profundamente a Butterfly. La joven corre a su habitación y vuelve con un niño rubio. ¿Podría olvidarla Pinkerton?. ¿Y su hijo?. Sharpless, profundamente conmovido, pregunta por el nombre del niño. Se llamará "Dolor" mientras su padre esté ausente. Luego, cuando haya regresado, se llamará "Alegría". El cónsul se despide. Cio-Cio-San queda abatida. Pero no quiere dejar de creer. Entonces suena un disparo de cañón en el puerto. Butterfly y Suzuki ven aproximarse una blanca nave, tal como la pequeña japonesa se ha imaginado miles de veces. La bandera tachonada de estrellas flamea en el cielo azul. ¡Es el Abraham Lincoln, su barco!. Desaparece el abatimiento, el corazón de Butterfly late con júbilo. Recoge todas las flores de los cerezos y las desparrama con Suzuki por la habitación, para el recibimiento. La casa debe estar adornada tan festivamente como durante la lejana noche de bodas.

Esperan impacientes mirando hacia la bahía. En la ciudad se encienden las primeras luces. Pasan las horas. Suzuki se duerme y también el niño. Sólo Butterfly está en pie y gira en la dirección por la que ha de aparecer Pinkerton. Suenan melodías del primer acto, acordes tiernos, recuerdos. En algún lugar lejano suena el nostálgico murmullo de un coro.
Cuando amanece y despierta Suzuki, Cio-Cio-San se deja convencer y duerme un rato. La criada la despertará cuando llegue Pinkerton. Poco después aparece el oficial al lado del cónsul y se acerca a la casa. Suzuki ve que hay una señora extranjera en el jardín y sospecha. Sharpless lo confirma todo: es la esposa de Pinkerton. Suzuki rompe a llorar. ¿Cómo se lo dirá a su señora?. Pinkerton siente remordimientos. Con palabras conmovedoras se despide de la casita en la que gozó de una breve felicidad y en la que destruyó una vida.


Butterfly ha despertado. Advierte la presencia del cónsul. Todavía tiene esperanzas de que aparezca Pinkerton para rodearla con sus brazos, aunque tal vez esté escondido para darle una sorpresa. Pero ve a la extranjera y a Suzuki, que no puede hablar a causa de las lágrimas. Cio-Cio-San se domina con un esfuerzo supremo y sólo quiere que le respondan a dos preguntas: ¿Pinkerton vive?. Si. ¿Volverá con ella?. Nunca. Butterfly comprende. Ha ido a llevarse al niño. Llena de dignidad sale al encuentro de Kate, la esposa "legal" de Pinkerton. Luego desea que la dejen sola. Reza al dios de sus antepasados y contempla durante un rato el puñal de su padre. En el puñal está grabado: "Muera dignamente quien no pueda seguir viviendo con dignidad". Suzuki debe llevarle el niño, del que se despide de manera conmovedora. Y se clava el puñal. Oye la voz de Pinkerton que la llama, tal como ha imaginado innumerables veces. Pero sus fuerzas ya no bastan para llegar a él.

Historia.- Puccini terminó la partitura en la Navidad de 1.903. El estreno tuvo lugar en el Scala de Milán el 17 de Febrero de 1.904 y a pesar de la gran actuación de la soprano Rosina Storchio fue una de las veladas más desdichadas de la historia de la ópera. El fracaso fue absoluto y vergonzoso. El compositor llevó a efecto algunos cambios. Junto con los libretistas, preparó una versión en tres actos. Ésta se estrenó en el teatro Brescia el 28 de Mayo del mismo año y fue recibida con entusiasmo. El papel principal estuvo a cargo de Salomea Kruszelnicka.

Vean y escuchen "Un bel di vedremo".

viernes, 17 de febrero de 2012

Recordando la Historia. Manuel Almeida y Largo Caballero


El padre de la comunista Cristina Almeida, que en 2.010 afirmaba que desconocía que su padre había sido partidario de Franco, Manuel Almeida Segura, pronunciaba las siguientes palabras el 15 de febrero de 1.936 en un teatro de Badajoz, en un mitin de la CEDA:

 “ESPAÑA está en peligro y hay que salvarla. Frente a España está la revolución, el marxismo destructor que quiere hundirla. Las banderas que levantan los socialistas son de odio, de destrucción, de sangre y de exterminio; las nuestras son de amor, de paz, de la tranquilidad, son las de España… Si contra nuestros votos se opusiera la violencia, la venceríamos con la violencia. Si contra nosotros se alzaran las pistolas las venceríamos con las pistolas.”

Por otra parte, Largo Caballero, El Lenin español, decía en el periódico El Liberal de Bilbao, el 20 de enero de 1.936:

"Quiero decirles a las derechas que si triunfamos colaboraremos con nuestros aliados; pero si triunfan las derechas nuestra labor habrá de ser doble, colaborar con nuestros aliados dentro de la legalidad, pero tendremos que ir a la Guerra Civil declarada. Que no digan que nosotros decimos las cosas por decirlas, que nosotros lo realizamos".

Asimismo, decía este sujeto en el Cinema Europa de Madrid el 10 de febrero de 1.936:

“Si los socialistas son derrotados en las urnas, irán a la violencia, pues antes que el fascismo preferimos la anarquía y el caos".

Pero lo gordo viene ahora, en unas palabras que aparecían en el periódico “El Socialista” de fecha 9 de noviembre de 1.933:

“Se dirá: ¡Ah esa es la dictadura del proletariado! Pero ¿es que vivimos en una democracia? Pues ¿qué hay hoy, más que una dictadura de burgueses? Se nos ataca porque vamos contra la propiedad. Efectivamente. Vamos a echar abajo el régimen de propiedad privada. No ocultamos que vamos a la revolución social. ¿Cómo? (Una voz en el público: ‘Como en Rusia´). No nos asusta eso. Vamos, repito, hacía la revolución social… mucho dudo que se pueda conseguir el triunfo dentro de la legalidad. Y en tal caso, camaradas habrá que obtenerlo por la violencia… nosotros respondemos: vamos legalmente hacia la revolución de la sociedad. Pero si no queréis, haremos la revolución violentamente. Eso dirán los enemigos, es excitar a la guerra civil… Pongámonos en la realidad. Hay una guerra civil… No nos ceguemos camaradas. Lo que pasa es que esta guerra no ha tomado aún los caracteres cruentos que, por fortuna o desgracia, tendrá inexorablemente que tomar. El 19 vamos a las urnas… Mas no olvidéis que los hechos nos llevarán a actos en que hemos de necesitar más energía y más decisión que para ir a las urnas. ¿Excitación al motín? No, simplemente decirle a la clase obrera que debe preparase… Tenemos que luchar, como sea, hasta que en las torres y en los edificios oficiales ondee no la bandera tricolor de una República burguesa, sino la bandera roja de la Revolución Socialista”

En 1.934, decía:

 “No creemos en la democracia como valor absoluto. Tampoco creemos en la libertad”.

Y sigue con su verborrea, esta vez en su discurso con motivo del XIII Congreso del PPSSOO celebrado en 1.932, cuando era Ministro de Trabajo:

"El Partido socialista no es un partido reformista (...) cuando ha habido necesidad de romper con la legalidad, sin ningún reparo y sin escrúpulo. El temperamento, la ideología, y la educación de nuestro partido no son para ir al reformismo".

Si se critican las palabras de Manuel Almeida, ¿por qué no hacer lo propio con las de Largo Caballero?






jueves, 16 de febrero de 2012

El poder judicial


Todos confiamos . . . bueno, casi todos,  en el poder judicial con la independencia e imparcialidad que debería tener para garantizar la verdadera Justicia. Pero a veces parece que esta independencia e imparcialidad no se toleran. Lo hemos visto estos días con el caso del juez “estrella” Garzón: millares de personas, con comportamientos de auténticos “hooligans”, “mass-media” y demás aparato del “agip-prop”, se han lanzado contra los magistrados del TS al ver la sentencia. Para eso el juez Garzón, es “nuestro juez”, oiga.

Bien mirado, estas reacciones y manifestaciones ya se veían venir, ya que durante el proceso hubo amenazas concretas. Una muestra de esto son las declaraciones del defenestrado sujeto Gaspar llamazares, hombre de gesto adusto y verbo encizañador, como ya hemos dicho varias veces, cuando dijo que la sentencia era “un linchamiento y un escándalo que ni respeto ni acato”. Como puede apreciarse, una palabras llenas de prejuicios ideológicos, al más puro estilo del sectarismo político propias del doctorado más intransigente.

Como puede verse, toda una lección de democracia y respeto a la Justicia por parte de este sujeto y de sus seguidores. No saben cómo arreglárselas para volver a las andadas.

Por otra parte, los tribunales valen y sirven si son de los nuestros. En caso contrario, y como siempre, son fascistas. No soportan  que hayan empapelado a “nuestro” juez. Pero lo más curioso es que estos defensores de BG, no han leido ni la sentencia. Así son estos sujetos.

Luis David Bernaldo de Quirós Arias

La lucha sindical


No se entiende muy bien la actuación de los sindicatos UGT y CCOO que, al ver las reformas laborales propuestas por el PP, se lanzan a la calle como turbinas para el enfrentamiento y, como dicen, para la lucha sindical.

El cinismo es total, ya que dichos sindicatos han sido cómplices con su silencio durante el “zapaterato”, de la mayor tasa de paro desde que existe  lo que se llama democracia.

¿Por qué no protestaron en su día cuando el paro había alcanzado los cinco millones de desempleados? ¿Por qué no protestaron en su día también por el despilfarro que suponían  las sangrías bestiales de todo tipo de subsidios y subvenciones, que han traído la crisis económica más brutal que se recuerde?.

Parece que lo que buscan es la toma callejera de otros tiempos, porque son incapaces del mínimo consenso. Su clíbano mental e ideológico así se lo impide.

Además no se paran a pensar la escasa representatividad que tienen. Desde que la pandilla de íncubos tomó el poder en el 2.004, a nuestros días, los sindicatos han perdido  medio millón de afiliados.

Pero es igual. No les importa. Con tal de contar con sectores radicales que sigan ciegamente el manual del “agit-prop” y que miren constantemente para el panel ideológico, tienen suficiente.
En fin, esta casta sindical aferrada a sus cargos, es como la casta política: mentirosa e hipócrita.


Luis David Bernaldo de Quirós Arias

miércoles, 15 de febrero de 2012

Recordando la Historia. Masacres en Badajoz


«En la provincia de Badajoz, los asesinatos con ensañamientos se repiten constantemente durante la dominación roja.

En Fuente de Cantos, después de incendiar el Juzgado, la Notaria, el Registro de la Propiedad, un convento y otros edificios, las turbas condujeron ante un tribunal revolucionario a numerosos vecinos del pueblo, que fueron después encerrados en la Iglesia Parroquial, atacada a continuación desde el exterior a tiros por las masas marxistas, que acabaron prendiendo fuego al edificio, en el que se encontraban entre los detenidos bastantes mujeres y niños de corta edad; perecieron quemados en el interior del templo D. José María Manzano Marín, industrial; D. Francisco Álvarez Rojas, jornalero; D. Manuel Macías Tomás, industrial; D. Antonio Díaz Lancharro, comerciante; don Francisco Bermejo Rubio, labrador; D. Manuel Sánchez Boza, empleado; D. Fernando Carrascal Salamanca, estudiante; D. Juan Esteban Pagador, propietario; D. Andrés García Gómez, viajante; D. Fernando Pagador Rosario, propietario; D. Manuel Iglesias González, y D. Luis Ibarra Pérez, labrador; de estas víctimas, nueve perecieron completamente carbonizadas, siendo identificadas por los objetos incombustibles que llevaban consigo; otros entre ellos el Juez, resultaron heridos, sufriendo síntomas de asfixia, y el resto de los detenidos logró sustraerse al incendio por haber alcanzado, pasando por una puerta reservada, una torre pequeña del edificio, a salvo de las llamas.

En Almendralejo, perteneciente a la misma provincia de Badajoz, fueron asesinadas numerosas personas, algunas de ellas en el patio de la cárcel, y otras en un convento, empleándose preferentemente como medio de ejecución bombas de mano y botellas con líquidos inflamables, que abrasaban a las víctimas.

En Burguillos, donde también fueron asesinados numerosos vecinos, fue arrojado vivo a un pozo y cubierto con gran cantidad de escombros, Ramón García Maraver, se setenta y seis años, labrador; en el mismo pueblo fueron quemados vivos en una hoguera Juan Fernández Salguero, de veintiún años, y Aurelio Díaz Gómez, de veinticinco; Rafael Requejo Santos, de treinta y siete años, casado, forjador, fue colgado en un árbol y muerto por los milicianos, que practicaron ejercicios de tiro sobre la víctima; los sacerdotes don José Castilla Herrera y D. José María Vázquez Díaz, fueron enterrados vivos hasta la cintura y maltratado hasta que murieron.

En el pueblo de Fregenal [fue en Valencia del Ventoso], de la misma provincia, fue también enterrado vivo hasta la cintura el guardia civil D. Fernando Rastrollo González, sobre el que hicieron numerosas descargas los milicianos, apareciendo destrozado el cadáver.

En San Vicente de Alcántara fue asesinado en su propio domicilio, ante su esposa e hijos, Ramón Camisón Serra, por un grupo de milicianos.

En el pueblo de Azuaga, del Partido Llerena, se cometieron noventa asesinatos, siendo bastantes de la víctimas mutiladas y sometidas a vejaciones, pudiendo ser mencionado, entre otros muchos, el caso de D. Fernando Murillo Gómez-Alvarez, que después de apaleado en el patio de la cárcel, fue castrado con unas tenazas y rematado en el cementerio. En otros pueblos de la misma provincia de Badajoz sometidos a la dominación roja, se cometieron también numerosos asesinatos y bastantes violaciones, destacándose los desmanes cometidos por las masas y milicias del Frente Popular en Granja de Torrehermosa, Campillo de Llerena, Guareña, Villanueva de la Serena y Don Benito.

Fuente: documentación enviada por los Ayuntamientos de la provincia de Badajoz al Fiscal General del Estado.

La foto corresponde a los asesinados en Granja de Torrehermosa. Entre ellos, una niña de once años

Luis David Bernaldo de Quirós Arias

martes, 14 de febrero de 2012

Frases célebres, dichos, proverbios, etc


"La verdad es lo que es, y sigue siendo verdad aunque se piense al revés".
Antonio Machado


"Todo hombre tiene tres variedades de carácter: el que realmente tiene; el que aparenta, y el que cree tener".
 Jean Baptiste Alphonse Karr


"La justicia no espera ningún premio. Se la acepta por ella misma. Y de igual manera son todas las virtudes".
 Marco Tulio Cicerón.


"La ignorancia es la carga más pesada. Pero quien lo lleva no lo siente".
Valeriu Butulescu


"La vida es fascinante: sólo hay qye mirarla a través de las gafas correctas".
Alejandor Dumas.


"El hombre no posee el poder de crear vida. Por consiguiente, no posee tampoco, el derecho a destruirla".
Gandhi


"Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida"
 Pitágoras
 

"El derecho a la educación y a la libertad de enseñanza son los pilares del modelo en materia educativa y expresa que ninguno de estos dos derechos fundamentales habría de ser sacrificado o preterido al otro."
José María Aznar

"Amigo viejo vale más que el dinero".
Refrán popular.


"Cada uno alega en derecho de su dedo". Refrán popular que nos quiere decir la inclinación que tenemos para defender lo que nos conviene, o lo que es nuestro.

"Al bien, bien; y al mal, yesca y pedernal".
Refrán popular.


"La inteligencia es una espada cortante y de duro acero. El carácter es su empuñadura, y sin empuñadura no tiene valor".
Anónimo.


Luis David Bernaldo de Quirós Arias

lunes, 13 de febrero de 2012

ZP, el millonario



Como ya sabrán, ZP ha entrado en el Consejo de estado ¿Cómo es posible esto? ¿Quién lo ha elegido para semejante puesto? ¿Dónde está la democracia? ¿A quién va a aconsejar este sujeto después de la que ha dejado? ¿Qué consejos son los que va a dar este palurdo?.

Lo que sucede es que este obtuso y ruin personaje pasa a cobrar, entre unas cosas y otras, nada menos que ¡¡¡145.000 € al año, diez veces más que la pensión mínima !!! . Además, dispondrá de coche oficial con chófer, teniendo asimismo, una escolta de 35 agentes que cobrarán, como es lógico, también lo suyo ¿Qué dicen a esto los indignados?

La verdad es que no entendemos muy bien como un tipo que ha arruinado a España en todos los órdenes, pueda tener estas prebendas vitalicias. ¿Qué clase de legislación tenemos?.

Luis David Bernaldo de Quirós Arias

La Ópera ( X I I )



IL TROVATORE
(Autor: Giuseppe Verdi - Actos: IV)
    
 Fuente.- En la elección de sus argumentos, Verdi se encontró dos veces con el dramaturgo español Antonio García Gitiérrez (1.812-1.884), que representa una tendencia del romanticismo español, sombrío, trágico, lleno de misterios, heroico. Verdi escribió su ópera Il trovatore basándose en El trovador, del citado dramaturgo.
El argumento de Simón Bocanegra lo tomó más tarde también de las obras del español, y no de Fiesco de Schiller, que trata el mismo caso.

Personajes.- Leonora, condesa de Sargasto, dama de palacio de la princesa de Aragón (soprano); Inés, su dama de compañía (soprano); el conde Luna (barítono); Ferrando, su escudero (bajo); Azucena, una gitana (mezzosoprano); Manrico (tenor); Ruíz, su amigo (tenor); un viejo gitano, un mensajero, compañeras de Leonora, soldados y monjas.

Lugar y época.- En Vizcaya y Aragón, a comienzos del siglo XV.

Argumento.- Después de una breve introducción orquestal, se levanta el telón sobre el patio de entrada de un palacio español. Es de noche. (Cada acto lleva un subtítulo propio: el primero es "El duelo"). Mientras el conde de Luna, intranquilo, hace guardia bajo las ventanas de Leonora, a la que pretende, Ferrando comenta un trágico suceso relacionado con la familia del primero. El viejo conde tenía dos hijos, pero a uno de ellos (una gitana), cuya madre había sido ejecutada en la hoguera, lo secuestró de la cuna y lo arrojó al fuego. Los oyentes, soldados del conde, se estremecen de horror y juran vengar el crimen, si la gitana vive todavía.

Leonora mira con impaciencia por la ventana en espera de un misterioso desconocido del que se enamoró durante un torneo y que desde hace varias noches aparece ante el castillo para cantarle canciones de amor. Leonora expresa su anhelo en la noche suave y azul. Finalmente le responde la sencilla romanza del trovador.

También Luna oye la canción. ¡Por fin podrá hacer frente al odiado rival!. Leonora desciende corriendo las escaleras, pero en la oscuridad cae en los brazos del conde de Luna. De las sombras surge el trovador. Luna reconoce a su enemigo mortal Manrico. El terceto (Leonora, Manrico,Luna) es de una gran fuerza dramática. El telón cae mientras los dos hombres se baten.

El acto segundo lleva el subtítulo de "La gitana". Comienza en un campamento de gitanos, cuyos habitantes realizan sus trabajos de herrería al compás de un coro melodioso y que se ha hecho célebre.
Junto al fuego del campamento está sentada Azucena. La llama ondulante evoca en ella recuerdos horribles: piensa en la muerte de su madre. Su hijo Manrico está acurrucado a sus pies. Ha vencido al conde en el duelo, pero, en un repentino arrebato de sentimientos inexplicables, le ha perdonado la vida. Azucena cuida su herida. Con creciente horror, Manrico oye su canción, que en ese momento parece describir el rapto de un niño. Pero los pensamientos de Azucena son cada vez más confusos. La gitana refiere el lejano episodio como si hubiera arrojado a su propio hijo a las llamas. Manrico se sobresalta horrorizado: si es así, entonces ¿quién es él?. Pero la gitana vuelve en sí y le asegura que es su hijo. ¡Que no lo dude y que esté dispuesto a vengarse en cualquier momento de la familia Luna, que quemó viva a su abuela!. Un mensajero lleva a Manrico la noticia de que Leonora, convencida de su muerte, quiere ingresar en un convento. Manrico se despide de su madre y sale corriendo.

La escena siguiente se desarrolla en el claustro de un convento. Luna se ha enterado también de la intención de Leonora y está preparado con sus hombres para secuestrarla. También él cree que Manrico está muerto. El cumplimiento de sus deseos parece ser inminente. En una aria melodiosa (y difícil de cantar) encuentra sonidos muy tiernos para la anhelada dicha de amor. Acompañada de cánticos religiosos (un bello coro femenino a cuatro voces sin acompañamiento, ejemplo magistral de sencillez y hondo sentimiento), Leonora marcha hacia el altar. Entonces el conde Luna interrumpe la procesión y quiere apoderarse de Leonora. Pero en el mismo instante aparece Manrico a la cabeza de sus hombres. Mientras los soldados luchan, huye con su amada.

El acto tercero, "El hijo de la gitana", comienza en el campamento militar de Luna, que se prepara para atacar el castillo en que se han hecho fuerte Leonora y Manrico. Los soldados llevan a una gitana a la que han hecho prisionera. A pesar de sus evasivas, Ferrando cree reconocer a la mujer que en su momento secuestró y quemó vivo al hermano del conde. En el colmo de la desesperación, Azucena llama a su hijo: "¡Manrico!". Luna, lleno de odio, tiene pues una doble razón para matarla.

La escena siguiente se desarrolla en el castillo. Un amor intenso une a Manrico y Leonora. ¡Cuántas bellas melodías se le ocurren a Verdi para expresarlo!.  Pero la noticia de la captura de su madre arranca al trovador de sus sueños. En un instante se transforma en un soldado duro como el acero, y su canto de amor se transforma en el canto de combate que se ha hecho tan popular.

Esta stretta es una piedra de toque para los tenores, un final de acto tan entusiasta que a menudo se pide que se repita. Ante el júbilo del público, el espíritu del canto se pone por encima de la "lógica" dramática.
El último acto es "El juicio". Han hecho prisionero a Manrico, que languidece en un calabozo subterráneo en el castillo de Luna. Su madre está con él. Leonora ha dado el difícil paso de rogar al vencedor por la vida del amado. Verdi creó para esta situación el expresivo "Miserere", en el que se unen magistralmente, formando sombríos acordes, la voz lejana de Manrico, las exclamaciones de dolor de Leonora, un coro invisible y la orquesta.

Aparece Luna: está decidido a ejecutar a la gitana y a su hijo. Está dispuesto a liberar a Manrico por un solo precio: el amor de Leonora. Ésta toma una difícil decisión después de luchar consigo misma, pero no logra mantener su promesa. Secretamente ingiere un veneno que lleva oculto en un anillo. Pero puesto que el veneno tiene un efecto muy lento, el júbilo por la salvación de su amado tiene tiempo para abrirse paso en su voz.

El último cuadro se desarrolla en las profundidades del calabozo. Las dos víctimas esperan su ejecución. A Azucena la acosan visiones terroríficas (la melodía con que ha contado en el acto segundo la muerte de su madre y el niño, vuelve como recuerdo), pero Manrico logra tranquilizarla. Una melodía íntima, una de las más sencillas y bellas que escribió Verdi, se convierte en un magnífico dúo ("Ai nostri monti").
Aparece Leonora. Rápidamente pide a su amado que utilice el camino abierto hacia la libertad. Pero como ella no quiere seguirlo, Manrico cree que lo ha traicionado.

El dúo dramático es subrayado extrañamente por la voz de Azucena, que suena como surgiendo de lejanos sueños. Manrico reconoce la verdad sólo cuando Leonora cae moribunda a sus pies. Luna, que llega corriendo, se siente traicionado y hace que arrastren al trovador inmediatamente al cadalso. Entonces despierta Azucena. Con un gesto triunfal, Luna le muestra desde la ventana la ejecución cumplida. "Era tu hermano", son las últimas palabras de la gitana y de la ópera.

Historia.- Verdi solicitó ya en 1.850 un libreto basado en la pieza de García Gutiérrez. Después del estreno de Rigoletto, comenzó la composición, a pesar de que al mismo tiempo trabajaba en La traviata. El libretista murió mientras trabajaba, el 17 de Julio de 1.852. Leone Emmanuele Bardare terminó la redacción del libreto basándose en los esbozos existentes. El estreno, el 19 de Enero de 1.853, en el teatro Apollo de Roma, se convirtió en un éxito total. En el término de dos años Il trovatore recorrió todas las ciudades importantes, tanto de Europa como de América.

Escuchen y vean "Coro de gitanos" de esta ópera.


domingo, 12 de febrero de 2012

Garzón, contento con su conciencia


“La Verdad del Caso UCIFA de la Guardia Civil”. Serafín Rafael Gómez Rodríguez.

Leo una vieja historia contada por un guardia civil eminente, el  Ilustrísimo Señor Serafín Rafael Gómez Rodríguez, Coronel  de la Guardia Civil, Doctor, en Derecho  por la Universidad Complutense con calificación de sobresaliente cum laude por unanimidad, La Licenciatura la realizó con nota media final de carrera de sobresaliente, Magíster Artis en Administración  Pública por el I. Universitario Ortega y Gasset, Máster en Dirección de Seguridad por ICADE, y otros cursos menores en Dcho. Internacional, Seguridad, P. Judicial o Medicina Legal.

En la parcela profesional, está titulado en Adiestramientos Especiales; en Servicios de Inteligencia, Gestión Económica y Técnica, y en Circulación y Tráfico.

Estudios extranjeros: Dignatary Protection Course, en Arizona, por el Departamento de Estado de EE.UU; Análisis de la Información, por la CIA (EE.UU); Organización del Sistema Fiscal, Aduanero y Antidroga del Reino Unido, por el NCIS británico en Londres.

Ha ejercido el mando voluntario: Servicios Especiales (Terrorismo Navarra, 84/87); Servicio de Seguridad de S.M. el Rey (Jefe Grupo Escoltas, 81/84 y 87/91);  Servicio Fiscal (Información Antidroga, 91/92); Jefe del Servicio de I+D (93/96) y SUBAPO (Jefe de Análisis, Optimización y Gestión Interna).

Actividad docente ha sido profesor durante años en la Universidad Carlos III y  en el Centro de Estudios Jurídicos del Mº de Justicia.  Así mismo, ha impartido diversas conferencias en la U. Complutense, Centros de la Guardia Civil y de Estado Mayor, sobre temas jurídicos, de seguridad y gestión de recursos. Ha sido ponente en diversos Cursos sobre Delincuencia Organizada.

Con motivo de actuaciones relevantes, está en posesión de dos condecoraciones extrajeras y nueve nacionales. Una de ellas al Mérito de la Guardia Civil con Distintivo rojo, por la localización y detención personal del comando Nafarroa de ETA en 1986, hiriendo en enfrentamiento armado a sus dos dirigentes, Mercedes Galdós “Vitxori” y J. Legorburu “Txato”, autores entre otras acciones criminales de 17 asesinatos. A ellos les siguieron otros comandos, integrados por 41 terroristas, quedando ETA prácticamente desarticulada en Navarra desde entonces.

En ella nos cuenta de un magistrado recientemente enriquecido, naturalmente no con su paga, cosa imposible para cualquier juez.

Para lo cual nunca o casi nunca ha respetado las normas y se ha llevado por delante a cualquier ciudadano que le conviniese para su prosperidad, solía suceder que este ciudadano no respirase por donde el juez o el Gobierno respiraban. Los faldones de su toga estaban hechas un asco del el polvo del camino, naturalmente camino socialista, ahora.

Contaba el coronel: En 1992 es desmantelada la UCIFA (Unidad Central Antidroga de la Guardia Civil) por el Juez Baltasar Garzón y Luis Roldán (menuda pareja, los dos ricos ahora). Roldan y Garzón además de amistad compartían intereses. Si el primero era nombrado Ministro, el otro seria nombrado Director General de la Guardia Civil. Ya por aquel tiempo la guardia civil investigaba el golfo enriquecimiento de Roldán y éste lo sabía. Serafín-Rafael Gómez Rodríguez, “La Verdad del Caso UCIFA de la Guardia Civil”, p.1.

La Justicia condenó a varios mandos y números de la Guardia Civil por pagar, con una parte de la droga decomisada, a los confidentes que lo hicieron posible (práctica irregular utilizada por todas las policías del mundo y más en la España socialista de entonces, donde no había dinero para comprar confidentes. Los fondos reservados se utilizaban para otros menesteres más provechosos de sus administradores socialistas, que así les lucen)

Estos habían descubierto a dos guardias de su grupo (Domínguez y Porras) que sustraían droga que luego vendían. Fueron denunciados, le tocó al juez Garzón, que vio el filón para hederse famoso.
Les convenció para que se trasformasen en “arrepentidos clónicos” del juez Garzón, que asumió las readaptadas declaraciones de estos corruptos, y les garantizó generosos beneficios penales a cambio de las acusaciones que debían hacer sobre los mandos y compañeros que les descubrieron, según guión prefabricado por los colaboradores del Juez, designados expresamente por Roldán (buen pájaro, evidentemente de fiar, sobre todo para el juez aspirante a famoso). Estos guardias corruptos fueron mínimamente condenados, Los que los descubrieron fueron expulsados de la Guardia Civil, multados y encarcelados muy duramente.


Sigue contando el ilustre guardia:

El juez se permite el lujo de difamar públicamente a uno de los miembros de la UCIFA, el Comandante Pindado, en quien el juez parece focalizar su odio a la Guardia Civil. 

En las páginas 320 y 321 del libro “El hombre que veía amanecer”, libro que cuenta las muchas gracias del juez prevaricador, éste afirma que “el Comandante Pindado insultó gravísimamente a todos los guardias civiles para salvarse de sus responsabilidades, y que, en el colmo de su bajeza moral para exculparse, afirmó que “un guardia civil, un número, es... escoria”. Ante tales insultos degradantes para los guardias civiles, Garzón escribe que «le agredieron las entrañas las palabras de tal personaje sin alma de oficial» y que ordenó a la mecanógrafa que las reflejase especialmente “Marta, ponga eso entre comillas y en negritas”. En fin, el Juez da todo lujo de detalles sobre lo que le declaró Pindado.

San Garzón contra Satanás.

El Juez Garzón miente como un bellaco, porque nada de esto que publica en su libro es verdad, ni figura en las declaraciones del sumario. ¡Jamás el Comandante Pindado dijo lo que el Juez Garzón afirma en su libro! y escrito está en el sumario lo que realmente ocurrió. Es alucinante seguir leyendo cómo tergiversa Garzón el caso UCIFA en su conjunto y cómo insulta al Comandante citado y a la Guardia Civil, acusando a su Dirección incluso del delito de prevaricación, al decir que concedió a Pindado un retiro vitalicio del 200 por cien para “vivir del cuento por sus servicios prestados a la Patria”. Remata el ridículo Juez “, con este tipo de democracia para qué coño queremos libertades, si Franco no ha muerto joder, es que no nos damos cuenta; en la Guardia Civil hay más dictadores que en toda América Central y del Sur”.

He rescatado las declaraciones del Comandante, nada hay de insultos, ni de todas las gilipolleces que refleja en su libro. Falso lo del 200 por cien de pensión arbitraria.

Es conocido su vampirismo del trabajo real de los policías y guardias civiles en aras de un arribismo enfermizo, como me decía la extraordinaria Fiscal Carmen Tagle, tan despreciada en vida y tan llorada “especialmente Garzón” delante de los fotógrafos.

¿Cómo puede un Juez mentir y difamar con tan enorme malicia, sobre algo que consta por escrito? ¿A qué se atreverá este Juez cuando se dilucide algo solamente testimonial y no se pueda acreditar? ¿Será igual de golfo?

Resumo las circunstancias reales de la declaración de Pindado de 17-12-92´.

Tenía órdenes de autoinculparse del pago con droga a confidentes; con ello el caso UCIFA se hubiera cerrado cómodamente para Garzón y para Roldán, que era el que patrocinaba el caso previo pacto con el Juez (la pareja ideal). Para amedrentar al Comandante le incomunicaron, le privaron de su abogado y le amenazaron con echar a su familia de su vivienda oficial de inmediato. En esa situación, en la que los colaboradores del juez llevaban 6 días ablandándolo ¿torturándolo? Le sacaban de prisión en algunas ocasiones y le reunían en puntos aislados con su esposa, a la que en paralelo sacaban a solas de su domicilio asustándola con largos paseíllos en coche (algunos de noche), conminándola a convencer a su marido para que se inculpara y así sacar adelante a sus tres hijos, prometiéndole entre otras cosas comprarle un buen piso a su nombre si lo conseguía (el Roldan, por aquella época, manejaba inmensos fondos reservados con cierta gracia).

Coacciones y amenazas permanentes para obtener confesión, torturas por el Art. 174 del C. Penal, no dieron su fruto. El Juez se encabronó cuando el Comandante exige, antes de firmar y sin autoinculparse, que tachen una línea que ha quedado en blanco para que no la pudieran rellenar con algo no dicho, así consta en el sumario (el Comandante sabía con quién se jugaba los cuartos) y. El Juez, lleno de ira, ordena ponerle unos grilletes y sacarlo esposado por la puerta principal de la Audiencia Nacional, previa cita de fotógrafos y cámaras de TV.

Luego siguieron cuatro meses de prisión en aislamiento total, eliminando por recusación al incómodo (por su independencia) Presidente del Tribunal que le debía juzgar y, finalmente, la condena prevista por el instructor.

¿Qué decir de un Juez, que miente e injuria descarada y públicamente? ¿Lo hace por ganar dinero y fama? La conclusión no puede ser otra que la de que se trata de un auténtico sinvergüenza (RAE: el que comete actos ilegales en provecho propio, o que incurre en inmoralidades) en éste es el caso, en ambas acepciones, del Juez Baltasar Garzón, nuevo rico gracias a sus publicaciones infames), que injuria y miente a pesar de saber que se puede comprobar tal falsedad.

Si Josep Ramoneda afirmaba («El País», 18-2-2001) que lo dicho en ese libro de Garzón sería «parcial o imprudente», yo añado que es delictivo e inmoral, porque delito es injuriar públicamente e inmoral es hacerlo para lucrarse.

Su  segundo libro “Un mundo sin miedo”. Bodrio filosofal sobre las virtudes del Juez vistas por sí mismo y un cortar-pegar de informes policiales fagocitados, tiene algo gravísimo: revela informaciones que sólo ha podido conocer por razón de su cargo y que no deben ser divulgadas, por generar grave daño para la causa pública y para terceros. Me refiero a lo que narra el Juez sobre la detención de la cúpula de ETA en Bidart (Francia), proporcionando datos clave para la identificación del confidente que propició tal éxito policial. Cuestión delicadísima que en absoluto figura en el atestado policial y que sólo ha podido conocer reservadamente por razón de su cargo. Acaba de condenar a muerte a una familia y si se lo ha in- ventado, la misma familia puede ir pensando en el exilio, al tiempo que echa por tierra una estrategia de infiltración policial de graves consecuencias.

En esencia, como dice el Tribunal Supremo, al aplicar el Art. 417 del C. penal en una condena a un funcionario por revelación de información conocida por su cargo: “Nada más desmoralizador que el custodio de la legalidad, en el concreto aspecto del sigilo profesional se convierta en el infractor de la norma", STS, 2ª, de
19-6-2003.


El juez Baltasar Garzón ha querido, previo millonario cobro, airear su vida privada desde su tierna infancia, mezclándola con relatos profesionales falsos o reservados sobre lo sucedido con personas detenidas.

Pero ese  obsesivo pavoneo con gente VIP, tras captar al gran profesional Luis del Olmo, para abrir le las puertas de los famosos y de enormes titulares cual superman en sumarios escogidos, no tiene maldita gracia. Cuando se comprueban las mentiras, difamaciones y daños que es capaz de producir, por ganar dinero como sea, no se comprende que siga siendo Juez (gracias a Dios, que en esta ocasión se demoró un pelín, ya no lo es).

Se despide el enterado Guardia Civil: En definitiva, hay que concederle al Juez Garzón, de inmediato, su ansiado Premio Nobel. Pero no el de la Paz, sino el Nobel al Juez Sinvergüenza. Y para certificar su enorme merecimiento al premio, el Candidato Garzón puede contar conmigo. Le guardaré una copia de los documentos comentados y de algún otro más, ahora que voy a ser su más fiel testigo protegido.

Serafín Rafael Gómez Rodríguez.

Recordando la Historia. D. Jacinto Benavente


El Premio Nobel de Literatura 1922, D. Jacinto Benavente, decía en 1.935:

"Los más vulgares delitos comunes han ascendido a la categoría de delitos políticos. Se roba y se asesina en nombre de una idea. Con mostrarse afectos los criminales al régimen, han gozado de la condición de delincuentes políticos. En cambio, los delincuentes políticos no han sido tratados como criminales, con el beneplácito de los gobernantes... Es una farsa trágica la dictadura del proletariado. En el fondo esa dictadura es una dictadura burocrática de una pequeña parte del proletariado. Los directivos sólo procuran apoderarse del bombo de esta lotería de la revolución, y mejor aún, para no esperar los azares de la fortuna, antes del sorteo se alzan con el dinero de los premios".

Luis David Bernaldo de Quirós Arias

jueves, 9 de febrero de 2012

Frases célebres, dichos, proverbios, etc


"Daría todo lo que sé por la mitad de lo que ignoro".
Descartes


"Cuando los padres han construido todo, a los hijos sólo les queda el derrumbarlo".
 Karl Kraus


"La peor verdad sólo cuesta un gran disgusto. La mejor mentira cuesta muchos disgustos pequeños y al final, un disgusto grande".
 Jacinto Benavente


"Gobernar es el arte de crear problemas con cuya solución mantiene a la población en vilo".
 Ezra Loomis Pound.


"La ignorancia y el error son manantiales de mal humor".
Barón de Holbach


"La vida es como un viaje por mar: hay días de calma y días de borrasca. Lo importante es ser un buen capitán de nuestro barco"
Jacinto Benavente.


"Amigo de mesa y mantel, no te fíes de él".
Refrán popular.


"Alguacil descuidado, ladrones cada mercado"
Como puede deducirse, este refrán popular indica los problemas que surgen cuando los encargados de la justicia son descuidados y negligentes. Esto viene al dedo a la España que nos dejó la camarilla socialista.


"El carácter es la fuerza sorda y constante de la voluntad".
Lacordaire.


"Aunque estén sin legañas, a veces los ojos engañan!.
Refrán popular.



Luis David Bernaldo de Quirós Arias

Imágenes para el recuerdo


Carroll Baker. Pinchar sobre la imagen para ampliarla.

sábado, 4 de febrero de 2012

Hoy, el cónclave


Como ya sabrán, hoy sábado 4 de febrero de 2.012, tendrá lugar en Sevilla el trigésimo octavo, o “treintayochoavo”, como dirían los que van para ministros y para ministras”, Congreso del PPSSOOEE que, bien mirado, más que un congreso es un cónclave, ya que lo que se va a dilucidar no son innovaciones, ni debate de  ideas, ni proyectos. Simple y llanamente, de lo que se trata es de la sucesión y de cubrir el cargo del Bobo Solemne, asunto este que se presenta lleno de trifulcas y divisiones.

Los candidatos, como es sabido, son Rub-al-Kaaba y Karma Chacón (no confundir con el karma budista, hinduista o yainista), a los que alguien ha bautizado con “El Felipe con barbas” y “El Zapatero con faldas”, respectivamente.

Mintiendo como siempre, quieren engañar, como siempre también, con la manida, llevada y traída “renovación”. ¿De qué renovación hablan si precisamente los candidatos han pertenecido a un gobierno que llevado a España al abismo en todos los órdenes?

Aparte de esto, y si han leído “El País”, habrán visto que la Karma es un producto publicitario aireado por su marido, publicista. Esta “sujeta”, o “miembra” del PPSSOOEE, representa lo más rancio del felipismo-zapaterismo, además de ser una anti-española (“Todos somos Rubianes”).

En fin, de lo que se trata en este cónclave, como es obvio, no es el futuro del PPSSOOEE, sino el de sus dirigentes que, como ya hemos escrito en este blog, no pueden vivir sin la ubre.

Nota.- Por si alguien no ha visto el vídeo de Rubianes insultando a España, ahí lo tienen. Pinchen, vean y oigan esta joya.



Luis David Bernaldo deQuirós Arias

viernes, 3 de febrero de 2012

Más efectos desastrosos


Hemos comentado varias veces en este blog, las secuelas y efectos negativos que ha dejado el “zapaterato”. Quizá uno de los peores ha sido el amordazamiento a que fue sometida media España, ya que mucha gente no podía decir lo que pensaba, o no podía crear, o no podía hablar, e incluso, muchos no podían leer ni escribir, ni ser francos ni honestos. Así de claro.

Y esto sucedía porque el chantaje político, social, cultural, psicológico y moral, campaba dentro de los muros de la Patria mía, con la obsecuencia de buena parte de lo que se llama “oposición”. Ahora que están en el poder, veremos a ver qué es lo que hacen.

Luis David Bernaldo de Quirós Arias

La Ópera ( X I )



Argumentos de algunoas óperas

LA TRAVIATA
(Autor: Giuseppe Verdi - Actos: III)

     
 La fuente de esta ópera es La dama de las camelias de Alejandro Dumas hijo. Cuando éste era joven, legó a su amada, una mujer de mundo llamada Alphonsine Plessis, conocida en la ciudad como "La dama de las camelias", que murió joven, un monumento poético, primero en el marco de una novela, más tarde en un drama. Un gran monumento de mármol en el venerable cementerio de Père Lachaise oculta su cuerpo, arrebatado a los 25 años por la tuberculosis. Sigue viviendo, idealizada, en la obra del joven Dumas, donde se llama Margarita Gautier, y Violeta Valéry en La traviata verdiana.


Personajes.- Violeta Valéry (soprano); Flora Bervoix, su amiga (mezzosoprano); Annina, la criada de Violeta (mezzosoprano o soprano); Alfredo Germont (tenor); Giorgio Germont, su padre (barítono); Gaston, vizconde de Létorières (tenor); el barón Douphol (barítono); el marqués de Obigny (bajo); el doctor Grenvil, médico (bajo); criados de Violeta y Flora, un comisario, damas, caballeros.

Lugar y época.- En París y alrededores, hacia mitad del siglo XIX.

Argumento.- El preludio se ha hecho célebre y con razón. En él suenan, con infinita delicadeza (que en aquel entonces se consideraba "no verdiana"), los temas principales de la ópera: amor y muerte. El último como una extinción silenciosa, como el marchitarse de una flor después de un breve florecimiento. El amor, en cambio, con una melodía llena de movimiento interior, con más sentimiento que sensualidad (lo que podría corresponder más al carácter de Verdi que al libreto). Luego suena una música festiva. En la casa de Violeta, una famosa y bella cortesana parisiense, hay baile y banquete. Un amigo presenta al joven Alfredo Germont que, respondiendo a una iniciativa de Violeta, levanta su copa al son de un brindis que se ha hecho muy popular. Violeta responde con la misma melodía, pero a la soñadora glorificación del amor que canta Alfredo opone una alabanza de la vida de placer. El baile sigue, pero un ataque de tos sorprende a Violeta la "Traviata", que se podría traducir como la "Descarriada". Alfredo se ocupa de ella y reconoce el profundo amor que siente por ella desde hace un año. Violeta, que conoce demasiado la vida para creerle en seguida, responde con palabras ligeras. A pesar de ello, su hondo sentimiento la conmueve profundamente. Le regala una de sus flores preferidas, una camelia. Alfredo pregunta cuándo volver. "Cuando la flor se haya marchitado". "¿Mañana entonces?". "Sí, mañana". Las luces se apagan y Violeta se queda sola en sus salones vacíos. Entonces abre su corazón. Verdi ha hecho de este largo monólogo una obra maestra tanto desde el punto de vista musical como desde el psicológico. La voz comienza vacilando, como si antes tuviera que organizar todo lo que ha oído.

Sin embargo, la mujer de mundo rechaza una vez más el sentimiento auténtico que comienza a crecer en ella. Con "¡Folli, follie!" interrumpe la melodía de amor y entona una canción triunfal al oropel mundano y al placer. En sus coloraturas cada vez más audaces y ligeras se combina dos veces, desde la lejanía, la voz de Alfredo con su motivo de amor, pero la frivolidad de Violeta conserva el lugar dominante.

El acto segundo se desarrolla en el campo, cerca de París. Alfredo y Violeta viven allí felices, unidos por un profundo amor. Cuando Alfredo se entera por medio de la criada de que Violeta planea vender todas sus posesiones para dejar de ser una carga para él, parte hacia la ciudad, donde espera obtener el dinero necesario para seguir con aquel tren de vida. Se anuncia una fiesta a Violeta. Ésta cree al principio que tiene delante al comprador al que se dirigió. Pero quien está allí, con resolución fría, casi despectiva, es el padre de su amado. Ha ido a "salvar" a su hijo, a rescatarlo de los brazos de la "descarriada". Pero bastan unos instantes para convencerle de su grave equivocación. La persona con la que se encuentra no sólo es una auténtica señora sino también una mujer que ama sinceramente. El dúo es largo, muy bello desde el punto de vista melódico y psicológicamente impecable. Germont, el padre de Alfredo, debe exigir el fin de la relación casi contra su propia convicción. Está en juego la felicidad de su hija, cuyas perspectivas de matrimonio fracasarían si su hermano sigue viviendo con una mujer de dudosa reputación. Violeta, dispuesta a defender su amor, se siente débil ante la respetabilidad burguesa, que nunca ha conocido.

Al principio cree que sólo será una separación temporal, tal vez sólo fingida. Pero Germont le pide algo más difícil: una separación definitiva. Y no sólo eso: el sacrificio debe hacerse de manera que Alfredo deba pensar en el fin del amor de Violeta, incluso en un engaño de su parte, para que se "cure" completamente. Después de una difícil lucha interior, Violeta se decide a dar ese paso como la prueba más alta de su verdadero amor. Profundamente conmovido, Germont, que ha ido como enemigo, la abraza antes de retirarse. Violeta escribe rápidamente las dos cartas pedidas. Anuncia a su amiga Flora que acudirá esa misma noche para participar en una gran fiesta, y a su amado, que en cualquier momento regresará de París, le explica que no puede seguir soportando más toda aquella vida. La "dama de las camelias" se siente atraída de nuevo por el placentero trajín de la vida mundana de la ciudad. Entonces aparece Alfredo en la puerta. Violeta, muy alterada, se arroja llorando en sus brazos (mientras en la orquesta estalla la melodía de amor).

Violeta escapa. Al principio, Alfredo se queda perplejo. Nunca ha visto así a su amada. Entonces descubre la carta. Pero cuando quiere salir corriendo detrás de Violeta, lo rodean los brazos de su padre. Su magnífica aria de consuelo corresponde a los últimos instantes de este agitado acto.

El baile en la casa de Flora constituye el marco del segundo gran final. Baile, lujo, brillantes escenas corales. Violeta aparece del brazo del barón Douphol. Teme un encuentro con Alfredo, a quien nunca ha dejado de amar. Su íntima melodía, repetida tres veces, contrasta con el ruido frívolo de la mesa de juego. Alfredo está allí y reta a Douphol a una partida. Los rivales se sientan a la mesa para jugar. Alfredo gana sin interrupción y su estado de ánimo es cada vez más acalorado e impredecible. Violeta le dice que evite aquellos círculos. Alfredo está dispuesto a todo, pero sólo con la condición de que Violeta le siga. En ella luchan los sentimientos más opuestos. La promesa que ha hecho se lo prohibe, explica al amado. Alfredo cree que se refiere a Douphol y se enfurece. Convoca gritando a los demás invitados, que son testigos de una horrible escena: Alfredo insulta a quien antes amaba y con palabras ofensivas le arroja en el rostro el dinero que acaba de ganar. Violeta se desvanece. En medio de la turbación de todos los presente, la voz seria y severa de Germont impone tranquilidad, y exige cuentas a su hijo por haber insultado sin justificación a una dama.

El acto tercero tiene un magnífico preludio orquestal en el que la melodía inefable y dolorosa de los violines recuerda la atmósfera de amor y muerte que había fijado el "leitmotiv" de toda la obra en la introducción al primer acto. Violeta yace en su casa, mortalmente enferma de tuberculosis. Es sólo una sombra de sí misma. La vida nocturna y agotadora  ha destruido su juventud radiante y la preocupación por Alfredo ha consumido su alma. Fuera se oye el ruido del carnaval. Entra el médico y da ánimos a Violeta, pero ella sabe que sólo moribunda puede abrazar a su amado, cuya visita le ha anunciado una carta de Germont. Verdi ha creado esta escena de manera conmovedora: Violeta lee la carta con voz temblorosa mientras que una susurrante melodía de violín le recuerda tiempos pasados. Cristaliza una gran aria: la despedida de Violeta del pasado, de la vida.

Alfredo abra la puerta de golpe y corre a los pies de Violeta. En la orquesta se oyen, por así decirlo, los furiosos latidos del corazón de ambos amantes, hasta llegar a un impetuoso arrebato de júbilo. Los llena una nueva esperanza, nuevos planes, un nuevo amor, una nueva vida, lejos de París, otra vez en la soledad, en la felicidad...

Un sentimiento desconocido y dichoso aleja el dolor y el presentimiento de la muerte dorando sueños que jamás podrán ser realidad. Cuando entran Germont y el médico, Violeta ya ha expirado en brazos de Alfredo. Entre las numerosas muertes operísticas, la de La traviata es una de las más conmovedoras y bellas. En su época, en la que se moría en escena de una puñalada o por envenenamiento, fue también una audaz innovación.

Historia.- La traviata se estreno en el Teatro de la Fenice de Venecia, el 6 de Marzo de 1.853, siendo un auténtico fracaso, que Verdi admitió dolorosamente. Una de las cusas delcitado fracaso, fue que el papel de la actriz principal estaba representado por una mujer de gran presencia física, robusta y fuerte, y que al morir de tuberculosis provocó la hilaridad entre el público. Un año más tarde, se hizo un nuevo montaje, corrigiendo este eror y otros, lo que hizo que esta vez obtuviese un gran éxito al ser representada en el Teatro de San Benedetto de Venecia, el 6 de mayo de 1.854. Desde entonces, La traviata ocupa un lugar de honor entre las principales óperas. (Hasta aquí capítulo XI. Se insertó “Brindisi” por un joven Plácido Domingo”)

Vean y escuchen a jun joven Plácido Domingo en el "Brindisi", de esta ópera



Luis David Bernaldo de Quirós Arias

jueves, 2 de febrero de 2012

Frases célebres, dichos, proverbios, etc


"Los hijos cuando son pequeños, entontecen a sus padres; cuando son mayores, los enloquecen".
Proverbio inglés


"La verdad se corrompe tanto con la mentira como con el silencio"
Marco Tulio Cicerón


"Cuando un gobierno dura mucho tiempo se descompone poco a poco y sin notarlo"
Montesquieu


"¡Triste época la nuestra!. Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio".
Albert Einstein


"El primer paso de la ignoracia es presumir de saber".
Baltasar Gracián


"Amigo de taza de vino, es amigo suyo y no mío".
Refrán popular


"Alhaja que tiene boca, ninguno la toca".
Refrán popular que quiere decir que todo el mundo se aleja de aquello que puede traer gastos.


"Ayer entró rogando, y hoy está mandando".
Refrán popular


"La fama es un efluvio; la popularidad, un accidente; las riquezas, efímeras. Sólo una cosa perdura: el carácter"
Horace Greely


"A posteriori".Término latino que se emplea cuando se dice o hace algo una vez que ha pasado, teniendo los elementos de juicio suficientes para saber  cómo se podría haber hecho ese algo. Podríamos traducirlo al español como "a toro pasado". Una anécdota sobre esto es la de Cristóbal Colón que, encontrándose reunido con varias personas, les estaba explicando y comentando sus descubrimientos. Los allí reunidos reconocían que era una verdadera hazaña, aunque no entrañaba dificultad alguna, le dijeron. Ellos mismos también hubiesen descubierno el Nuevo Mundo. Al oir semejantes palabras, Colón les propuso poner un huevo cocido de pie, es decir, verticalmente. Inmediatamente se pusieron todos manos a la obra, sin conseguirlo. Entonces le dijeron que aquello era imposible. Cuando Colón vio que ninguno conseguía poner el huevo como él les había dicho, cortó uno de los extremos del huevo, consiguiendo, obviamente, ponerlo de pie. Automáticamernte, todos dijeron que de esa manera ellos también lo hubiesen puesto de pie. Conclusión: "a posteriori" todo es fácil.

Luis David Bernaldo de Quirós Arias

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